El teatro se vuelve encuentro, juego y expresión en esta muestra escénica creada por un grupo de personas adultas con Síndrome de Down, que durante tres meses exploraron nuevas formas de comunicar, sentir y habitar el cuerpo.
Dirigido por Freddy Chipana, el taller propuso un espacio de confianza, alegría y creatividad donde cada gesto se convirtió en palabra y cada movimiento en historia compartida.



 
					
